¡La sierra anda suelta!

¿Quién ordeno esto? Frente a mi casa solían haber unos hermosos arbolitos a los que se trepaban los gatos, donde meaban los perros, hacían nidos los pajaritos, se ocultaban algunos novios furtivos y y se subieron unos hijos de puta con motosierras a acabar con sus ramas. Ojalá que alguien pueda comprobar que esto lo hacen por la salud de los arbolitos; aunque, un árbol sin hojas es como uno de nosotros sin pulmones... Todos estábamos contentos porque se está construyendo el centro comercial en la esquina, pero ¿qué tienen que ver los árboles en todo esto? ¿por qué se metieron con ellos? ¡Qué asco de gente, che!, ¡tan lindos que estaban los arbolitos, carajo! La verdad que al verlos me sentí ultrajado y de luto. Estoy de luto por ellos.

Tala un árbol, maleduca a un hijo y quema un libro

Durante un debate en una universidad de Estados Unidos, antes de las últimas elecciones, le preguntaron al ex gobernador del Distrito Federal de Brasil y actual Ministro de Educación, Cristovao "Chico" Buarque, qué pensaba -como humanista, no como brasileño- sobre la internacionalización de la Amazonia.

"Basta pensar que ellos (el gobierno de EEUU) ya demostraron que son capaces de usar sus armas, provocando una destrucción miles de veces mayor que las lamentables quemas realizadas en los bosques de Brasil. En sus discursos, los candidatos a la presidencia de los Estados Unidos han defendido la idea de internacionalizar las reservas forestales del mundo a cambio de la deuda".

"Comencemos usando esa deuda para garantizar que cada niño del mundo tenga la posibilidad de comer y de ir a la escuela. Internacionalicemos a los niños, tratándolos a todos ellos sin importar el país donde nacieron, como patrimonio que merece los cuidados del mundo entero mucho más de lo que se merece la Amazonia".

¡Llegó el circo!

Coincidió el encuentro de éstos tigres encerrados a unas cuadras de mi oficina y el de una noticia en internet que me sigue haciendo pensar sobre nuestras actitudes... Aunque lo que se lea aquí resulte para algunos muy lejano o brutal por tratarse de Africa, pues nada más es cuestión de voltear un poquito a ver alrededor en nuestros "continentes negros", nuestras "sociedades negras" con nuestros "gobiernos negros".

Para mis amigos que no saben inglés, les cuento que el artículo trata sobre la vida en una población de Etiopía, en Africa, donde los hombres acostumbran a casarse con la mujer que les da la gana, apropiándose de ella por la fuerza si es que encuentran resistencia.

Esta historia trata de una niña de 12 años que había sido raptada por un grupo de hombres (no dice las edades) para obligarla a casarse con uno de ellos. Se la llevaron lejos del poblado y estaban en sus trámites cuando -de entre la forestación- apareció una manada de leones que los espantó. Los leones se quedaron allí junto a la niña protegiéndola hasta que aparecieron sus familiares y la policía que ya casi la daban por muerta. Cuando apareció esta gente, los leones -famosos en Etiopía por tragarse a varias personas- simplemente se levantaron y se fueron dejando a la niña sana y salva en manos de su familia.

Para pensar. ¿no? ¿De qué lado de la jaula estamos cuando encerramos a estos pobres bichos?


Lions step in to help abducted Ethiopian girl

ADDIS ABABA, Ethiopia - A 12-year-old girl who was abducted and beaten by men trying to force her into a marriage was found being guarded by three lions that apparently had chased off her captors, a policeman said yesterday.

The girl, missing for a week, had been taken by seven men who wanted to force her to marry one of them, said Sgt. Wondimu Wedajo, speaking by telephone from the provincial capital of Bita Genet, about 350 miles southwest of Addis Ababa.

She was beaten repeatedly before she was found June 9 by police and relatives on the outskirts of Bita Genet, Wondimu said. She had been guarded by the lions for about half a day, he said.
"They stood guard until we found her and then they just left her like a gift and went back into the forest," Wondimu said.

"If the lions had not come to her rescue, then it could have been much worse. Often these young girls are raped and severely beaten to force them to accept the marriage," he said.

Tilahun Kassa, a local government official who corroborated Wondimu's version of the events, said one of the men had wanted to marry the girl against her wishes.

"Everyone thinks this is some kind of miracle, because normally the lions would attack people," Wondimu said.

Stuart Williams, a wildlife expert with the rural-development ministry, said the girl may have survived because she was crying from the trauma of her attack.

"A young girl whimpering could be mistaken for the mewing sound from a lion cub, which in turn could explain why they didn't eat her," Williams said.

Ethiopia's lions, famous for their large black manes, are the country's national symbol and adorn statues and the local currency. Despite a recent crackdown, hunters also kill the animals for their skins, which can fetch $1,000. Williams estimates that only 1,000 Ethiopian lions remain in the wild.

The girl, the youngest of four siblings, was "shocked and terrified" after her abduction and had to be treated for the cuts from her beatings, Wondimu said.

He said police had caught four of the abductors and three were still at large.

The United Nations estimates that more than 70 percent of marriages in Ethiopia are by abduction.

By Anthony Mitchell
The Seattle Times

Bjork

PLUTO

Excuse me
but I just have to
explode
explode this body
off me
wake-up tomorrow
brand new
a little tired
but brand new.

La vida desde afuera de un carro II

"Me río de los embotellamientos".

La vida desde afuera de un carro I

"Sigan sin mí; no hay apuro. Yo me subo en la próxima vida".

La miseria III

Tomé esta foto pensando en The Matrix. ¿Cómo estamos viviendo en realidad?

La miseria II

Sí, sí -lo sé-, estoy muy pesimista últimamente. Pero, bueno, es el resultado de una semana jodida y de no muy buenas noticias; del temblor de esta mañana y de la plática con mi viejo este mediodía.

Hoy salí a la calle a pescar imágenes y me encontré con esta paloma que coincidentemente tiene mucho que ver con lo que hablaba con mi viejo. Además, anoche renté una película argentina un poco deprimente y terminé apagando el fuego con gasolina.

Me están pesando mucho la miseria y los extremos. Aunque la gente vive a pesar de todo, veo a muchos que lo que hacen es frenar la miseria que se cierra sobre ellos como una pinza. "Hay que ajustarse los cinturones, habitantes y habitantas de este planeta", dicen en la tele los políticos. Siempre hay alguien a quien echarle la culpa y sobra gente para pagar los daños.

Mi viejo está sin trabajo desde hace casi quince años. Y no es que sea un ocioso, es que el gobierno se ocupó de desocuparlo en su etapa más productiva; justo cuando iba a tomar impulso para el último tramo de su carrera. Él, y mucha gente en Argentina, se cayeron del cable donde estaban paraditos mirando el futuro. Los dejaron caer, y nadie les dijo que debían aletear para no estrellarse; nadie les dijo que abajo la calle estaba dura, muy dura. "Tome, querido, aquí le va un vale por una vida miserable a cambio de sus años de servicio. Y agarre, viejo, porque es lo único que hay por ahora (y para siempre). No, no me venga con eso de que ha sido un buen empleado hasta ahora; eso fue el pasado; hoy es presente y el futuro no existe para usted, amigo; ¡el futuro es para nosotros, los que nos estamos cagando en su pasado y nos limpiamos el culo con su presente!".

Como decía el personaje de la película de anoche: "Involucionamos 215 años. Estamos igual que antes de la Revolución Francesa. Sin embargo en cada discurso se vomita sin reparo las palabras que fueron bandera de aquella revolución (Libertad, Igualdad, Fraternidad).

"In God We Trust", ¡el cielo es verde, queridos!, ¡la efigie de Washington es más venerada que las de Budah, Jesus y Yeovah juntos!, ¡compren pulseritas!, ¡habemus papam y Paris Hilton! ¡Pasen todos a ver el reality show de los plebeyos enseñando a engañar, a pasar por encima de los más chicos, a oler el culo del que está unos peldaños más arriba en la escalera!

Volvamos todos a ver "Mar Adentro", volvamos a ver la escena del cura en el piso de abajo y de Ramón Sampedro en la cama en el segundo piso: "La libertad sin vida no es libertad", dice el cura; "... y la vida sin libertad no es vida", responde el genio postrado. ¿Cuántos no podrían decir lo mismo que Sampedro? El tipo de cincuenta años que no consigue trabajo para vivir y retirarse dignamente; los cientos de chicos que estudian diseño gráfico en Tijuana, donde las universidades "venden" la carrera como hostia de la salvacion y del progreso, cuando el mercado no da ni para dos o tres puestos de trabajo; los migrantes empujados fuera de los límites de su país por los propios "representantes" a quienes ellos eligieron "democráticamente"; los agricultores menguados; los indígenas; los que tienen que hacer colas de horas enteras en los hospitales y en todas y cada una de las oficinas de gobierno.

¡Vaya, vaya!, ¡sí que está jodidito el mundo!, y no es cuestión de volverse un jesuita para componerlo, ni de llenarse el antebrazo de pulseritas; es cuestión de pensar en esas tres palabras que escribieron unos chicos de no más de 25 años hace más de 200: "Libertad, Igualdad, Fraternidad". Libres para tener un futuro; iguales para tener las mismas oportunidades, y fraternos para ayudar a que todos seamos dignos de los dos adjetivos anteriores.

¡Que vuelen las palomitas, señores!

La miseria I

Tal vez la foto no tenga nada que ver con lo que me preocupa últimamente; o tal vez sí tenga mucho que ver, quién sabe... simplemente mi ojo anda buscando estas cosas en este momento en el que me ronda la idea de la demagogia, del mal uso de la confianza, de la manipulación de los sectores de poder de toda índole. A veces siento que muchos estamos como esta perrita de la foto: desorientados en un entorno y un sistema decadentes; no porque yo esté en condiciones de quejarme de nada de lo que me pasa, pero sí de lo que le pasa a mucha gente y que indirectamente me llega. No soy un indolente, tampoco, no.

Hace un par de noches me quedé viendo un reportaje como hasta las 2 de la mañana; un programa muy bueno, "Openheimer", un periodista (¿argentino?) ganador del premio Pulitzer. En esta ocasión Openheimer entrevistó -entre otros- a Otto Reich, quien fuera "cabeza de lanza" de los gobierrnos de Bush padre y de Clinton para los temas de América Latina, y hoy lo es para Bush hijo. Un experto, un maestro de la diplomacia y de la retórica a favor de la imposición por la fuerza -de las armas o de los billetes- de la ideología mercantilista de Estados Unidos y de su visión de cómo debe estar el mundo -según ellos-.

Si hay algo que no soporto desde hace años es la postura de los políticos, su autosuficiencia, el creerse nacidos para el puesto e impuestos allí por voluntad divina, pero para hacer "su" propia voluntad, olvidándose de la voluntad de nosotros, los que los votamos o no, y sobre todo de la voluntad de millones y millones de personas que, sin la capacidad suficiente para vivir en una democracia, van y los eligen.

El tema tratado era el gobierno de Chávez en Venezuela y su vínculo y relación con el gobierno de Castro en Cuba; lo que Otto Reich califica como "el eje del mal", promotor de estallidos sociales pro-socialistas de izquierda y extremistas... ¡puaj! El tipo aseguraba con una soltura y un manejo tal de la informacion (fabricada) que Venezuela financia focos socialistas en América Latina; y mencionaba al socialismo y a la izquierda como quien habla del Ebola o de una peste parecida. Hablaba desde un estrado, desde una nube, defendiéndose de las respuestas de todo el panel. Incluso ante los planteos contrarios del panel yo me sentía desorientado. No me puedo jactar de ser un tipo informado, entonces me imagino a gente que no tiene real acceso a la información y que, cuando la tienen, les llega de gente como esta... y no lo digo sólo por Otto Reich; tampoco les creí un pito a los demás... Es que, con una respuesta de tres minutos solucionan todos los pedos del mundo y uno piensa: "¡Ah! ¡qué capo este tipo!" y cuando responde el otro, piensa: "¡Ah, que capo este otro!". Pero bueno, hay que estar informado y saber elegir la fuente; pero cuando empiezo a investigar sobre politicos, me da como asco...

Debería hacer algo más, comprometerme más... Ayer se armó una plática en la oficina, con mi compañero promoviendo la movida de Bob Geldof y Bono en contra de la pobreza en Africa. "¡Que bueno!", pensé yo; pero si toda esa movida fuese inversa y, en lugar de hacernos voltear a ver a todos hacia Africa, nos hicieran voltear a ver hacia nuestras calles, nuestra colonia, nuestra gente, el efecto sería aún más multiplicador, creo. Hay mucho, mucho por hacer para sacarnos de la miseria moral y social, pero el poder es un agujero negro hambriento y el dinero llama al dinero y los pobres nunca tendremos un dinerito que nos sobre para comprar un megáfono y hacernos escuchar mientras sigamos así. Está cabrón. Me siento como esta perrita, con esa misma cara, esperando algo sólido donde apoyarme en un mundo de cartón.